miércoles, 24 de febrero de 2016

O CEBREIRO

Los peregrinos del Camino Francés hacen, desde siglos, para obligatoria aquí. Es la puerta de entrada a Galicia, el único paso natural desde la meseta y, por tanto, lugar de descanso después de atravesar el fatigoso monte. Es también el lugar donde se produjo el milagro del Santo Grial (las leyendas proclaman al santuario de O Cebreiro como custodio del Santo Grial), y uno de los pocos que ha conservado las pallozas, las viviendas prerrománicas.



MUSEO ETNOGRÁFICO: Las pallozas estuvieron habitadas hasta los años setenta, y algunas de ellas sirven aún como alojamiento turístico. Son anteriores a la romanización, quizás de origen celta. Una de ellas se ha convertido en e museo etnográfico, donde se pueden contemplar utensilios tradicionales y la típica lareira (chimenea).


Interior de una palloza.



HOSPITAL DE PEREGRINOS: El conde San Giraldo de Aurillac lo fundó en el siglo IX para acoger a los peregrinos, muy numerosos ya de aquella época. Hasta 1853, los monjes benedictinos se ocuparon del hospital y de su iglesia. Tras la Desamortización quedó abandonado hasta 1963, cuando se restauró para convertirse en hospedería.




RELICARIO DE LOS REYES CATÓLICOS EN EL SANTUARIO DE O CEBREIRO: Conserva las reliquias del milagro, acaecido alrededor del año 1300. Se dice que, ante la incredulidad de un sacerdote, pan y vino se transformaron en cuerpo y sangre. El santuario, prerrománico, alberga una Virgen sedente, del siglo XII, y una gran pila bautismal para administrar el sacramento por inmersión.




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